19/10/10

Suicidio nº 84

Recorrido por la vida

Todo es raro ahora que se ve con otros ojos. Cuando eres pequeño el mundo es también más pequeño. Recuerdo que al principio sólo creía que existía mi barrio, y viajar a un pueblo o a otro barrio era como una aventura.
Cuando vas creciendo y te enseñan eso de las provincias, los paises, los continentes... ya con lo de los planetas alucinas pepinillos, porqué no decirlo, y en ocasioens es algo un poco difícil de asimilar, y como que lo fraccionas, lo haces en partes independientes que no estan unidas unas a otras. Así se vive más feliz.
Ya, en la secundaria, todo eso lo tienes claro, sabes diferenciar Valencia de Madrid, y Europa de China, aunque aún te quedan dudas sobre como puede ser Rusia un pais entre dos continentes y tan sumamente gigantesco... (Si, son esas estupideces que yo siempre me he preguntado)... en fin. No hay forma de esquiavr la bala, ya tienes conciencia del mundo, del universo, y desgraciadamente del yo, y ahí estas en la traumática adolescencia, donde tus hormonas ebullen deemoción al venir todo tan de pronto.
Cuando eres joven, todo es raro. Ya concoes el mundo en toda su magnitud, de hecho porque emprendes viajes impresionantes por el mundo, con amigos, con familia, solo si te vas de Erasmus. Todo es más grande y tu te das cuenta de que tu yo es tan insignificante como una mota de polvo encima de tu escritorio. Está ahí, pero con un golpe de tu mano lo apartas sin ningún miramiento en el momento más inoportuno. Te das cuenta de que tienes que vivir experiencias a tope, que este es tu momento de la locura, de todo lo que tienes que probar... pero siempre te quedas a medias.
De adulto, vuelves a ver que el mundo se reduce a tu familia y a tu pequeño barrio/oficina del trabajo del que no puedes escapar más que unos pocos días al año, donde ves por fin que no has aprovechado la vida lo suficiente.
De anciano ya crees haber tenido una buena vida, simplemente pro haber llegado al final, y no te importa ni el universo, ni conocer las provincias ni cosas así, solo a la gente que tienes más cerca.

Y este es el resumen de la triste vida humana.

Del puño y letra de Phoebe

2 comentarios:

Unknown dijo...

Increiblemente cierto... y casualmente estoy pasando por esa etapa de la adolescencia... Pero precisamente la estoy cultivando para que mi edad adulta no se convierta en eso que describes alli. Pienso que es decision de cada uno.. Gracias por darme algo hermoso y constructivo que leer siempre que entro a tu Blog :)

Raquel Pérez dijo...

Supongo que tienes razón, pero creo que no la vida adulta es tan "aburrida" como la pintas. Tal vez, si eres capaz de mirarla con los ojos de niña que sé que conservas, veas que ese pequeño mundo en el que estás recluido (barrio, oficina y demás) puede ser muy grande. Solo hay que mirarlo desde otra perspectiva. Y leer, para ir a otros mundos. Y ambicionar una vida dinámica, sin acomodarnos en la burbuja en la que nos creemos encerrados. Y viajar siempre que podamos, para recordar que el mundo es grande, y tenemos una eternidad para conocerlo: nuestra vida.


Carpe Diem. Dicen que es una cita muy usual, demasiado gastada por la gente. Algunos ya no le ven sentido, por ser tan conocida. Pero si la miras con otros ojos, verás que es la base de la vida.

Carpe Diem, Ego de mi corazón, Carpe Diem