28/5/12

Suicidio nº 171



¿Lo has olvidado? 
La vida crece entre los matices
Se esconde siempre en lo que no dices.

-Maldita Nerea-

Ahí estaba yo. De pie, queriendo gritar ¿Gritar? Tal vez solo intentaba que me saliera la voz, pero hay veces que no es tan fácil, el cerebro no manda la orden correcta y simplemente las cosas no salen por tu boca, si no  que se quedan en el corazón, porque de esta forma, es más fácil no equivocarme.

A lo mejor tengo miedo de ser feliz intentando cosas distintas ¿Quién sabe? Sólo sé que estoy aquí de pie como una estúpida sin decir nada, mientras lo que más quiero en este momento me mira con unos ojos que no se interpretar ¿Está bien la cosa? ¿Mal? ¿Va hacia atrás? ¿Me está tomando ya por tonta? 

En estos momentos me dan ganas de llorar para disipar tanta incertidumbre. En vez de eso, sonrío, que relaja también la tensión. pero menos. Me devuelve la sonrisa. ¡Genial! ¿Ahora qué? Me sienot como si fuera una niña pequeña que no sabe nada de nada. Tal vez soy un poco así. Me retuerzo levemente los dedos entre las manos de puro nerviosismo.
Ahí aparece en el juego inesperadamente un beso, cálido, salido del corazón. ¿Y qué más podría desear ahora? Nada. Los besos lo dicen todo sin necesidad de palabras.

23/5/12

Suicidio nº 170

23 de Mayo

Todo tiene el significado que queramos darle. Para mi, hoy tiene doble significado. Hay cosas que te atraviesan el alma en tu vida y nunca sabes porqué, pero esa cicatriz se queda perpetuamente. No importa como intentes cubrirla, si hay días que no duelen, o incluso si pasan años enteros sin que te duela. Siempre se reabre, sobre todo cuando la felicidad en la vida no está de tu lado. 
Este años se ha abierto de nuevo, pero no es una herida molesta, de esas que estás deseando que se cure. Más bien es como un recordatorio de algo que recuerdas con mucho amor y cariño, de una época que no volverá, de un año trágico (Como este) de unas sensaciones que espero no volver a sentir, y de algunas otras que me gustaría revivir pero que es imposible.
Algunos creerán que es una locura, pero cuando no le cierras la puerta a alguien, esta se queda atrancada, oxidada, y a pesar de que no esté, le amas para siempre. No de una forma obsesiva ni mala, si no del mismo modo que amas a tu familia. Al fin y al cabo, es una parte de ti mismo que jamás va a desaparecer, y es mejor llevarlo contigo, que intentar enterrarlo en lo mas hondo de tu ser.
Hoy es un día especial, de nuevo. Un día para amar, para reír, para abrazar a alguien, para sonreírle a la vida y estar contentos por todo lo que tenemos a nuestro alrededor, las personas van y vienen, pero los sentimientos y los recuerdos, son eternos. Nadie puede arrebatarnos eso.

21/5/12

Suicidio nº 169

Ahora me doy cuenta de lo que realmente ha ocurrido: 



Un día la Diversión y el Aburrimiento estaban sentados bajo un árbol, y sentían que debían hacer algo diferente aquél día. El Aburrimiento no proponía nada, pero a la Diversión enseguida se le ocurrió muchos juegos y cosas con las que podrían matar el tiempo. Reunieron a todos para realizar una serie de juegos reunidos. 

Primero jugaron al escondite, y le tocó pagar al Despiste, con lo que tardaron mucho sólo con esta actividad. No encontraron al Amor por ningún lago cuando todos estuvieron pillados, pues se había entretenido en un claro recogiendo flores. Todos olvidaron enseguida al Amor y siguieron jugando. El Miedo pagó a la gallinita ciega y estaba aterrorizado sólo de pensar en taparse los ojos, pero pilló sin que se diera cuenta a la Amargura porque se estaba quejando de aquel juego. Siguieron los bolos y el corro de la patata. Después comenzaron con el tiro con arco. A la Diversión le encantaba este juego, así que lanzó y clavó la flecha justo en el medio de la diana. La Competitividad, tiró también y se enfadó porque la flecha estaba en el circulo de en medio, pero no tan, tan en medio como la de la Diversión. Le llegó el turno a la Locura, que se puso a reír sin ningún tipo de sentido y lanzó la flecha fuera del campo de visión de todos. Alguien gritó en la lejanía. Todos acudieron corriendo, ¡Le había atravesado ambos ojos al Amor! La Locura se sintió tan mal y tan responsable, que a partir de ese día, acompañó siempre al Amor para que pudiese cumplir su misión.


Conclusión, el Amor es Ciego y siempre, siempre, va acompañado de Locura.

16/5/12

Suicidio nº 168

Tiza

El patio estaba repleto, los niños corrían sin ton ni son de un lado a otro. Solo Micaela, sentada sobre un bordillo, se encontraba estática en mitad de aquel jaleo.Una profesora, con zapatos baratos y paso militar, cruzó el patio y sin fijar la vista en la niña, pasó por su lado, moviendo la chaqueta de punto de un lado a otro. De un bolsillo cayó una tiza al suelo. Micaela la miró con los ojos muy abiertos, nadie más parecía haberse dado cuenta de la tiza huérfana, con lo cual, cogió aquel trozo y lo sostuvo delante de sus ojos grandes y marrones. Se apartó el pelo de la cara con la otra mano y se humedeció los labios con la lengua. Aquello le daba una nueva perspectiva de todo ¿Qué podría hacer? Era una tiza grande, con lo cual podría encerrar muchas cosas maravillosas en su interior. Nadie la mirada, nadie, en todo el patio, en todos los días de su existencia como escolar que había pasado sentada en un bordillo del patio. Nadie, hasta que comenzó a usar el suelo como un gran lienzo. De su mano surgió en primer lugar un loro increíble, con las plumas largas, después, surgió un enorme y temible pirada. Los niños ya no corrían tan deprisa, pues nadie se atrevía a pisar el dibujo de Micaela. Cuando le dejaron más espacio, comenzó con el barco pirata, que ocupaba un cuarto del patio. Todos estaban boquiabiertos, nadie le decía nada, incluso los profesores, que tenían una política estricta sobre no pintar el suelo del patio, estabas paralizados. Algunos incluso se rascaban la cabeza o se tapaban la boca de asombro. El barco, con sus cañones, sus velas y su bandera pirata era magnífico. Micaela aún sabía que la tiza albergaba grandes maravillas, con lo que empezó a dibujar un torreón que ocupaba la mitad del patio, y una princesa con cabellos largos esperaba en la ventana a que el caballero la rescatase. No se hizo esperar mucho, el caballero, con su caballo, aparecieron pronto cerca del torreón, con un ramo enorme de flores. Le sucedieron un astronauta, una bailarina y un hombre tocando la guitarra española. La tiza parecía no acabarse nunca, al igual que la imaginación de la niña. Todos, en el patio,s e habían subido a clase para poder admirar desde las ventanas del edificio la obra de arte increíble con la que Micaela les había deleitado. Solo la niña estaba en el patio, ultimando los detalles. 
Unas gotas de lluvia empezaron a surgir de repente, sin llamar la atención. Algunos profesores sacaron raudos la cámara de fotos para que aquel mural nos e perdiera, los niños más pequeños se estaban dando cuenta, y comenzaban a llorar, los mayores gritaban de rabia diciendo que no era justo que aquello terminase de esa forma. La lluvia se hizo más fuerte y Micaela corrió a ocultarse dentro del colegio. Todos los niños querían bajar para decirle a Micaela cuanto se lamentaban por que su obra de arte hubiese desaparecido. Micaela les miró sin entender con aquellos grandes ojos marrones.
-La tiza siempre acaba por desaparecer. Lo maravilloso es que aún hay cientos de tizas esperando sacar de dentro de ellas cosas que no podemos ni imaginarnos.
Los niños se quedaron callados, pero los profesores reflexionaron ante aquellas palabras.

14/5/12

Suicidio nº 167


GASTA


La alegría de gastar sin darte cuenta. Sales una tarde, y compras un paquete de palomitas y dos entradas de cine. Más tarde, a golpe de tarjeta cenas en un restaurante, pagas una noche de hotel, unas flores, ropa sexy, un paseo en barca por la mañana, un regalo que brille mucho, un viaje, un anillo, ropa, gafas de sol, libros, música... en resumen, compras alegría.
Hay cosas que no puedes explicarlo, pero te crean un gusto increíble en el estómago al comprarlo, como cuando gastas dinero para un regalo que no es para ti, si no para alguien a quién quieres mucho. Es como que lo has comprado, y te mata la intriga por dentro, deseando que lo vea ya, y sonría y te abrace y te bese por lo mucho que le ha gustado tu idea y que hayas pensado en él (o en ella)
A lo mejor es cierto que estamos en una sociedad donde no sabemos vivir sin consumir, pero a veces esas escapadas consumistas nos dan alegría a la vida. Y dicen que el dinero no da la felicidad. Díganselo a alguien rico. Es la frase que los de clase media, o media baja usamos para no sentirnos tan mal por no poder gastar en todo lo que nos gustaría para satisfacer nuestros deseos.
Desde aquí os invito; gastad en un capricho cualquiera, algo que deseéis desde hace mucho tiempo y que no habéis tenido porque pensáis "uf, es demasiado caro". Gastad en algo que os haga feliz, porque no es una felicidad efímera si conservamos ese recuerdo, el de un viaje, un fin de semana, un beso por unas flores, una sonrisa por decirte lo guapa que estás con esa camiseta nueva.
No digo que seáis siempre unos derrochadores o unos materialistas. Simplemente, sed felices de vez en cuando, y un poco egoístas.

7/5/12

Suicidio nº 166

Ser Natural


Jugamos a ser otras personas. Nos arreglamos, nos vestimos de forma provocativa, ponemos maquillaje y objetos en nuestra cara, no somos cien por cien nosotros. Nos compramos ropas que creemos originales pero son clónicas,intentamos pintar, cortar, moldear, diferenciar nuestro cabello del de los demás. Nos llaman la atención los ojos diferentes, y si no los tenemos, nos ponemos lentillas que cubran el defecto de ser corrientes.
Estuve pensando en lo maravillosa que es la naturalidad. Natural. No vivir siempre colgado de estereotipos y detalles. Bailar de forma natural, volverse loco, correr al máximo para quedarte sin aliento y después tirarte sobre la arena. 
No hacer las cosas que se esperan de ti, volverte loco, ser salvaje, besar hasta que te duelan los labios, morder a otra persona solo por diversión, saltar a la comba como si tuvieras seis años, jugar al sambori, correr tirando de una cometa hasta que casi no puedas verla, llorar hasta que los ojos se te hinchen, cerrar los ojos y respirar muy fuerte cuando estás en el campo... Esas cosas son las que quiero hacer en mi vida.
Este es el manifiesto del cambio. Quiero vivir mi vida en libertad. No quiero pasarme la vida sufriendo por tener que saber que debo hacer a cada paso. Libre, libre libre.

Necesito libertad.

2/5/12

Suicidio nº 165

Tras dejar escrita la nota, me quedé bastante satisfecha. Era clara, evidente, sin dejar leer entre líneas otra intención que no fuese la que había plasmada.


"Voy a suicidarme. Creo que me tiraré por un precipicio


xoxo, Martina"

Lo dejé en un lugar bien visible, pegado en el cristal el cuarto de baño. Le dejé dormir, no había necesidad de despertarle hasta que su despertador sonase. Salí a hurtadillas, cogí el coche y me dirigí sin dar vueltas hasta el precipicio. Aparqué próxima al borde y me senté en el capó a esperar.

No sabía muy bien que esperaba. Estaba decidida a tirarme, era lo que iba a hacer, ya le había dado mil vueltas y era la única solución lógica que se le ocurría. Pero, aún así, le había dejado una nota a él, a ÉL. ¿Esperaba que fuera corriendo detrás de ella? Un poco sí ¿Deseaba que la vira tirarse? Ni pensarlo, era algo que no necesitaba público ¿ Entonces quería que le obligase a no saltar, que la cogiera en brazos y le diera un beso y le dijera que no tenía nada que temer...? No lo sabía. Tal vez. No. No sé.

¿Entonces, QUÉ?

Simplemente sentada en aquel capó del coche pensó y pensó. Siguió pensando. Comenzó a amanecer y su cabeza aún pensaba. Cuando vio las luces del todo-terreno, aún siguió pensando. ÉL salió del coche con als manos en los bolsillos del frío. A Martina las manos ya no le respondían de frío. pero eso no importaba. Se iba a tirar.

-No te tires

-¿Porqué?

ÉL simplemente se encogió de hombros. No se acercó dos pasos hacia ella. No la abrazó ni hizo el amago de besarla. Nada. Con lo cual ¿Porqué no iba a tirarse? La decisión estaba tomada. Ella se puso de pie en el borde del precipicio. ÉL le miró con los ojos vacíos, llorando a pleno pulmón, casi le costaba mantener la respiración. Pero aún así no hizo anda por detenerla.

Se tiró ¿Qué otra cosa podía hacer?