LA VIDA QUE QUERAMOS TENER
A veces es tan sencillo vivir que nos olvidamos que estamos en el mundo para algo. Las decisiones de nuestra vida no deberían tomarse a la ligera, pero realmente esa es la forma más divertida. Si lo planificas todo, al final tu vida simplemente parece un guión que debes seguir y cumplir a rajatabla: trabaja, ten hijos, ten un perro, ten una casa, un coche, nietos, haz un viaje con el imserso, muere.
Y no deberían ser así las cosas. Debería ir todo más fluido. Hay mucha gente que dice que el destino ya está escrito, y me gustaría de verdad pensar que yo tengo poder sobre mis decisiones, con lo cual, no hay nada más allá que haga que yo me enamore de este o de aquel. Que yo pueda decidir y cambiar en el último segundo si lo deseo. Pero, a lo que voy, si vivimos al día, puede que nuestra vida sea insignificante y al fnal no aportemos nada a la existencia, que simplemente pasemos sin pena ni gloria por el mundo. Y eso es un poco triste, todos deberíamos dejar nuestra pequeña muesca en el universo, por leve que sea, ya que si no, nuestra vida solo se verá reflejada en nuestros hijos.
Y eso no es nada malo, pero estaría bien que conociesen tu nombre por propios méritos y no que te reconociesen como, la hija de o el abuelo de a hecho cual. ¿no?
A lo mejor es un poco rebuscado, estoy en unos días de meditación sobre el futuro un poco duros, y necesito de verdad descargar la mitad de cosas que mi cerebro produce.
Espero que no caiga en vano lo que digo: HACED COSAS MARAVILLOSAS EN LA VIDA.
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