ESTRELLAS
Era todo deslumbrante e inmenso. Me sentí por un momento pequeña y aterrada ante todo ese esplendor pero después, simplemente me tumbé en la hierva y vi que podía ver las estrellas sin esfuerzo alguno. Me pareció tan increíble que todo lo que pensaba antes se disipó.

Mirando las estrellas boca arriba, noté que todo eso no importaba en realidad. Yo era yo. Tenía mi vida en mis manos, y tenía que hacer algo con ella. Vi todo un abanico de oportunidades en el futuro, y muchos caminos ahora para atravesar en mi presente. ¿Qué más podía pedirle al mundo?
Yo, solo debo preocuparme por que a mi me vayan bien las cosas. Ahora no importa nada más. Un poco de amor propio para vivir la vida, anda.
Y la gente va y viene, nadie es eterno en la vida, nadie. Ni nuestros padres, porque algún día nos dejarán y tendremos que enfrentarnos al mundo solos. Los amigos son importantes, si, pero también efímeros, y no es algo malo, porque el cambio, hace que en tu corazón te quedes un trocito pequeño de cada uno de ellos, y los lleves para siempre contigo. No hay que pensar que hay personas que ha sido un error, conocer. Simplemente, has crecido con ellos, y creo que puedes decir que gracias a ellos eres quién eres ahora en este presente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario